Hace 3 años saqué mi última certificación, la AWS Certified Solutions Architect - Associate. Ahora me caduca y tengo la opción de volver a pasar el examen o incluso sacar la de la categoría Professional. ¡Me hacen hasta un 50% de descuento en el examen por güenchaval! Pero no me la voy a volver a sacar. Llevo un tiempo dándole vueltas al tema de las certificaciones y, sinceramente, cada vez le encuentro menos sentido. Al menos en lo personal. En los últimos años he entrevistado a docenas de candidatos, supuestamente seniors, con certificaciones en AWS que se quedan petrificados con preguntas elementales sobre estrategias de backup, escalabilidad u optimización de costes. También me he encontrado con personas no certificadas que conocen al dedillo todos los entresijos de AWS y las buenas prácticas en la nube. Y también gente muy buena con todas las certificaciones. Una certificación en AWS, u otra tecnología, no es, ni será, para mí un determinante a la hora de contratar a una persona. Lo único que me dice es que esa persona se ha estudiado un libro, leído las FAQs de los servicios y ha realizado tests una y otra vez. Que no está mal. Algo es algo. Pero no es determinante. Ni siquiera para cribar candidatos.
¿Para qué sirven entonces las certificaciones? La de AWS, en concreto, además de para hacer caja, sirven para poder ser ser partner del proveedor de cloud. Es requisito indispensable para las consultoras y proveedores de servicios que quieran estar certificados por AWS. Dependiendo del tipo de partnership (silver, gold, platinum…), necesitarás más o menos empleados con una determinada certificación. Vamos, que más que ser interesante para que las personas puedan certificar sus conocimientos, es para que las empresas en las que trabajan obtengan reconocimientos. Bueno, también sirve para AWS en sus congresos te ponga un pin en la solapa por cada certificación que tengas, y te inviten a un reservado lleno de gente con muchos pins en las solapas.
La moda de las certificaciones no es nueva. Hace unos años había una fiebre por obtener certificaciones de SAP y Cisco para acceder a puestos de trabajo bien remunerados. ¿Quieres un sueldo de 3000€? Certifícate en SAP, decían.
En nuestro sector existe un bien endémico que es el intrusismo laboral. ¡Y menos mal! Durante años se ha peleado, sin éxito, porque exista un colegio de informáticos para que los ofendiditos que han estudiado una carrera de ingeniería, y han terminado picando código — como si eso fuera un problema —, puedan diferenciarse de los plebeyos con grados superiores, medios e incluso sin titulación — ¿Cómo puede alguien sin estudios ser mi jefe? — La titulitis si es de verdad un mal endémico, y no solo en este sector. Yo he trabajado como “ingeniero” sin tener ninguna titulación. También habiendo obtenido un grado superior en administración de sistemas. Y también con una carrera en ingeniería informática. Quizás pr mis inquietudes, haber aprendido a programar con 9 años y montar mis propias distribuciones de Linux con 15 años, haya facilitado mi acceso al mercado laboral tan temprano, sin tener ninguna titulación oficial. Vamos, que me contrataron porque sabía hacer el trabajo. Hay que decir, también, que todas las titulaciones que he obtenido a lo largo de los años me han aportado conocimiento para mi carrera profesional. Incluso la del truño, ese llamado ITIL. Pero ninguna de ellas ha sido indispensable. El 90% de lo que aprendí cuando estudié para obtenerlas se me ha olvidado ya. Porque como a todos les ha pasado, cuando estudié la carrera me dediqué a memorizar a corto plazo y aprobar exámenes. El mercado laboral iba, y va, por un lado y el programa educativo de ingeniería informática va por otro muy distinto. Requerir una titulación en ingeniería para acceder a un puesto de trabajo es absurdo, a menos que sea para trabajar en la universidad.
Un artista no destaca por haber estudiado historia del arte.
El tema de las certificaciones, y titulaciones académicas, tiene que reinventarse. Hay tanta oferta laboral que una certificación, tanto técnica como de idioma, ha dejado de ser condicionante para acceder a un puesto de trabajo. Las empresas tienen que bajar las expectativas. Los unicornios no existen. Aunque en muchas ofertas de trabajo pongan titulaciones y certificaciones como requisitos, recuerda que sólo son requisitos deseables y no obligatorios. Aplica a las ofertas de trabajo que te interesen, aunque no cumplas con todo lo que piden — ¡No nos llegan suficientes solicitudes!
Mi recomendación es que inviertas tu tiempo en aprender nuevas tecnologías. Nuevos lenguajes de programación. Nuevos frameworks. Nuevas plataformas. Eso es lo que me ha funcionado siempre para destacar. Nunca ha sido una certificación o un título, sino saber desenvolverme bien en las tecnologías requeridas para el puesto de trabajo. Ese conocimiento te puede venir de la propia experiencia laboral o de cultivarlo tú mismo. En mi caso, por ejemplo, dedico parte de mi tiempo libre a seguir aprendiendo y poniéndome al día. En el trabajo, muchas veces, se da un estancamiento tecnológico inevitable al tener que mantener un proyecto durante varios años. A veces, tienes la suerte de poder innovar y rejuvenecer algún sistema. Pero no es la norma. El año pasado desarrollé una herramienta para monitorizar configuraciones en la nube, usando Kotlin como lenguaje. Hace unos meses aprendí Rust. Ahora estoy programando en Golang para poder defenderme mejor a la hora de bichear con el código de Docker y Kubernetes. También estoy leyendo el libro de Crafting Interpreters, ¿para crear mi propio lenguaje de programación? Ya veremos. Nada de eso tiene o ha tenido que ver directamente con mi trabajo, pero seguro que me hará mejor profesional. Lo hago porque me gusta. Y porque con mis 40 palos quiero seguir surfeando en la cresta de la ola.
¿Debes certificarte? Si, siempre que sea la empresa la que te lo demande, y te pague los exámenes aunque los suspendas. No, si es para buscar trabajo. ¿Debes estudiar una carrera de ingeniería informática? Si, siempre que lo hagas por que te gusta la ingeniería en general y quieres estudiar, a nivel académico, como construir compiladores, estructuras de datos, puertas lógicas, y muchas matemáticas. Nunca lo hagas para obtener un mejor puesto de trabajo en este sector, a menos que quieras trabajar en la universidad o alguna empresa más clasista, tipo Airbus o la ESA. ¿Debes ofenderte porque tu título de ingeniería informática, o certificación, no es, en general, relevante para acceder a mejores puestos de trabajo? Haz lo que quieras. Pero deja de dar la brasa. Seguro que, al menos, alguien estará orgulloso de tu titulación.
¡Muchas gracias por leerme!